El expresidente Mauricio Macri anunció que mantendrá un perfil bajo durante la campaña electoral, tras haber impulsado un acuerdo entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA) en la Ciudad de Buenos Aires. Según fuentes cercanas, Macri decidió priorizar una agenda internacional, con viajes programados a Europa, para evitar tensiones internas en el PRO, que aún lidia con las críticas por su alianza con Milei. La decisión llega después de que LLA lograra una victoria parcial en las elecciones legislativas de mayo en CABA, liderada por el vocero presidencial Manuel Adorni.
El acuerdo PRO-LLA, que permitió al oficialismo consolidar su dominio en la capital, generó malestar en sectores del PRO que consideran que la fusión diluye la identidad del partido. La salida de Patricia Bullrich del Ministerio de Seguridad para candidatearse al Senado por CABA profundizó estas tensiones, ya que algunos dirigentes ven su cercanía con Milei como una entrega al proyecto libertario. Mientras tanto, el PRO busca mantener su influencia en distritos clave como Mendoza y Santa Fe, pero enfrenta el desafío de un Milei que, según analistas, «no necesita aliados» tras sus recientes éxitos electorales.
La estrategia de Macri de alejarse de la campaña refleja su intento de reposicionar al PRO como una fuerza autónoma de cara al futuro. Sin embargo, su ausencia podría debilitar al partido en un momento crítico, especialmente en Buenos Aires, donde la oposición peronista y la UCR buscan recuperar terreno. La dinámica en CABA será un indicador clave del éxito o fracaso de la alianza PRO-LLA, que podría redefinir el mapa político conservador en Argentina.
