El gobierno argentino, liderado por el presidente Javier Milei, anunció que está en negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para obtener un crédito de 20.000 millones de dólares. Este préstamo tiene como objetivo principal estabilizar la economía nacional y brindar tranquilidad a los mercados financieros. El acuerdo propuesto se enmarca dentro de un programa de facilidades extendidas, con desembolsos planificados en etapas, aunque aún no se han detallado las condiciones específicas impuestas por el FMI.
El ministro de Economía, Luis Caputo, destacó que este acuerdo difiere de los anteriores, ya que Argentina ha implementado ajustes económicos significativos previamente. Además del FMI, el gobierno está en conversaciones con otras entidades financieras internacionales, como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la CAF, para obtener créditos adicionales que permitan aumentar las reservas del Banco Central a 50.000 millones de dólares. Estas medidas buscan estabilizar el valor del peso, reducir la inflación y disminuir los índices de pobreza en el país.
Sin embargo, persisten dudas sobre el impacto y las condiciones de este nuevo acuerdo, especialmente en relación con posibles modificaciones en el régimen cambiario y sus efectos en la inflación y la cotización del dólar. Estas cuestiones son de particular relevancia de cara a las próximas elecciones legislativas, donde la economía será un tema central en el debate público.






