El exgobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, confirmó su candidatura a diputado nacional por Provincias Unidas, un espacio que busca representar al «interior productivo» y consolidarse como alternativa al kirchnerismo y al oficialismo de La Libertad Avanza. En un acto en la capital cordobesa, Schiaretti llamó a «dejar atrás las grietas» y propuso un modelo de desarrollo basado en el federalismo y la producción.
Sin embargo, su liderazgo enfrenta un obstáculo: la decisión de Natalia de la Sota, hija del fallecido exgobernador José Manuel de la Sota, de lanzar su propio espacio, «Defendamos Córdoba», lo que fragmenta al peronismo no kirchnerista. La división en el peronismo cordobés beneficia indirectamente a LLA, que lidera las encuestas en la provincia gracias al respaldo de sectores rurales y urbanos desencantados con la política tradicional. Schiaretti, consciente de este riesgo, busca posicionarse como una opción de centro, apelando a los votantes que apoyaron a Milei en 2023 pero hoy cuestionan su gestión económica.
Su estrategia incluye incluye la ampliación del presupuesto universitario, un tema que ha generado fuertes debates debido a la crisis económica que atraviesa el país.Contexto: Córdoba, tradicionalmente un bastión antiperonista, se convirtió en un pilar clave para el ascenso de Javier Milei en las elecciones presidenciales de 2023.
La fragmentación del peronismo podría consolidar la ventaja de LLA en la provincia, pero la experiencia política de Schiaretti y su arraigo local podrían alterar las expectativas. La campaña electoral en Córdoba promete ser una de las más competitivas del país.






